El campo de hierba verde, bajo la luz del sol, está lleno de vitalidad y verde, como una enorme alfombra verde esmeralda, que se extiende hacia el cielo.
En el campo, una vaca vieja saboreaba tranquilamente la hierba verde, y el pequeño pastor, tentado por la danza de las mariposas, corría y se movía lenta y cuidadosamente por el campo.
Por la tarde, el sol, que había estado activo todo el día, fue atenuando gradualmente su luz y se volvió suave, como una linterna roja con una llama suave, suspendida en el borde del campo y el cielo.
Tal vez estuvo suspendido por mucho tiempo, y luego lo vi hundirse lentamente y se detuvo suavemente tan pronto como tocó el suelo. Parece que con el apoyo de Yuan Ye, una vez más saltó juguetonamente sobre la enorme cama verde. La infinita naturaleza salvaje estaba teñida de verde oscuro por el sol poniente. Al mirar la puesta de sol en el campo, el pequeño pastor estaba tan sorprendido que no se atrevió a parpadear, por temor a que la linterna roja fuera arrastrada por una mano gigante en un abrir y cerrar de ojos.
El pequeño pastor abrió mucho los ojos y lo admiró. De repente, el atardecer tembló dos veces. Finalmente, como un conejito travieso, con el golpeteo rápido y ágil, se arrastró silenciosamente hacia la hierba y se despidió del pequeño pastor.
Esa noche el viento volvió a soplar suavemente, y las nubes parecieron sentir el final del atardecer. En el borde del cielo, las nubes ligeramente rojas también se dispersaron. De mala gana se puso el velo negro y se alejó. Está oscuro y los campos están mucho más tranquilos.
De repente, con el sonido de una suave flauta, el silencioso Yuan Ye volvió a la vida. Entonces, el sonido de la flauta se hizo más fuerte y más cercano. Siguiendo el sonido, vi una vaca vieja caminando lentamente. Resultó ser un pequeño pastorcito. Lo vi con sombrero y gabardina, sentado en el lomo de una vaca y tocando la flauta incansablemente, provocando la brisa del atardecer con un poco de frescor. La hierba del campo pareció entender el sonido de la flauta y bailaron juntas en el brumoso crepúsculo.
Habilidades de reescritura
1. Reescribir o modificar para adaptarse a propósitos o situaciones nuevas o diferentes.
2. Cambiar un estilo de escritura por otro, reescribir una prosa en un poema.
3. Cámbialo por otra forma de escribir, pero el significado sigue siendo el mismo.