Un artículo publicado en el "Chinese Journal of Critical Care Medicine" en el primer semestre de este año analizó las características epidemiológicas de 5.516 pacientes que murieron repentinamente a causa de la enfermedad, revelando parcialmente la respuesta a esta pregunta. Las investigaciones han descubierto que la verdadera causa de la muerte súbita son algunas enfermedades básicas, como enfermedades cardíacas, pulmonares, cerebrovasculares, etc. La muerte súbita suele tener varias causas obvias, siendo la agitación emocional la más común, mientras que otras causas comunes son la fatiga física, el consumo excesivo de alcohol y la ingesta excesiva de alimentos. Las cuatro causas principales de muerte súbita son casi iguales, es decir, cada una representa una cuarta parte. Los resultados de esta encuesta nos recuerdan que las personas con enfermedades cardíacas, cerebrales y pulmonares deberían evitar especialmente estas afecciones.
¿Cómo podemos reducir la aparición de muerte súbita? Lo más importante es entender tu condición física, especialmente tu salud cardiovascular. Según las estadísticas, más del 60% de las muertes súbitas son muertes súbitas cardíacas, en su mayoría causadas por enfermedades coronarias. Los pacientes con hipertensión, diabetes e hiperlipidemia pueden ser candidatos potenciales a sufrir enfermedad coronaria. ¿No deberían estos amigos simplemente controlarse? ¿Tres máximos? Además de los indicadores, también debes acudir al hospital para comprobar tu función cardíaca cada seis meses o un año. Además, la obesidad, el tabaquismo, el alcohol y las dietas altas en calorías aumentarán el riesgo de enfermedad coronaria. Los amigos con estos riesgos también deben controlar su función cardiopulmonar con regularidad.
¿Muchas muertes súbitas suelen ser físicas? ¿excelente? De hecho, todo esto puede ser una ilusión. Estas personas suelen ser personas que corren diversos riesgos para la salud sin saberlo. Debido a esto, todas las personas mayores de 3 años deben conocer su presión arterial, azúcar en sangre, lípidos en sangre e índice de azúcar en sangre, y controlar su función cardíaca con regularidad. Los grupos de alto riesgo también deben estar atentos a algunas señales de advertencia de un ataque cardíaco, como: dolor opresivo de corta duración en el precordio o detrás del esternón, además de opresión y dolor en el pecho, también pueden haber problemas como dificultad para respirar; y sudoración; dolor inexplicable en el brazo izquierdo, dolor de garganta, dolor de muelas. Las personas con un suministro insuficiente de sangre al cerebro también pueden experimentar síntomas como mareos y dolor de cabeza temporales, debilidad unilateral de las extremidades y dificultad para hablar. Una vez que se descubran estos problemas, busque tratamiento médico de inmediato para evitar que ocurra una tragedia repentinamente.
Para reducir la aparición de muerte súbita es muy importante tomar estas medidas preventivas. Sobre esta base, también deberíamos intentar evitar la influencia de los factores desencadenantes antes mencionados. Un temperamento demasiado irritable, un cuerpo siempre cansado, beber en exceso o comer en exceso con frecuencia afectarán el funcionamiento normal del sistema cardiovascular, especialmente provocarán arritmia o provocarán trombosis y estenosis de los vasos sanguíneos. Estos pueden provocar ataques agudos de enfermedades cardíacas o cerebrovasculares, y no rescatarlos a tiempo puede poner en peligro la vida. Las personas con peligros y riesgos ocultos de enfermedades cardiovasculares deben prestar especial atención al autocultivo. ¡Este es un buen hábito que tiene cientos de beneficios y ningún daño!