1. La fuerza principal del Kuomintang fue eliminada. El fracaso de esta batalla provocó que Chiang Kai-shek perdiera la capital para futuras batallas.
2. La victoria de la batalla de Huaihai intensificó la transformación dentro del Kuomintang y llevó a Chiang Kai-shek a dimitir nuevamente.
En tercer lugar, la victoria de la batalla de Huaihai aceleró el proceso revolucionario de China.