¿Cuál es el principio del motor turbofan? ¿Cuáles son las principales aplicaciones?

Primero hablemos del principio de funcionamiento del motor turbofan. En primer lugar, es diferente del motor turborreactor común. El motor turborreactor tiene un solo canal de aire. Pero un motor turbofan tiene dos conductos de aire, también llamados conductos. Mi motor está dividido en un conducto interior y un conducto exterior. El principio de conducción interior es el mismo que el de un motor turborreactor. Impulsa un ventilador grande en la parte delantera y el ventilador gira para empujar el flujo de aire hacia atrás. El conducto exterior es el espacio entre el motor y el conducto interior. El ventilador gira y empuja el flujo de aire hacia atrás.

Este diseño es en realidad para lograr una mejor eficiencia energética, porque este diseño puede mejorar en gran medida tanto la eficiencia térmica como la eficiencia de propulsión. En condiciones normales de vuelo, si la velocidad de vuelo permanece sin cambios, la turbina delantera generará alta temperatura cuando esté funcionando. La diferencia de temperatura acelerará la velocidad de escape del aire y el gas que fluye rápidamente se perderá mucha energía cinética.

El motor turbofan se desarrolló bajo esta demanda. De hecho, una comprensión simple es que se agregan varias turbinas delante del motor turborreactor y estos cargueros impulsan una cierta cantidad de ventiladores. El diseño de los dos conductos es redistribuir la energía del gas al ventilador y a la cámara de combustión respectivamente. Cuando el motor está girando, la relación del flujo de aire entre el conducto de derivación exterior y el conducto de derivación interior se denomina relación de derivación. Cuanto mayor sea la relación de derivación, más eficiente será el consumo de combustible y mejor será el rendimiento económico.

Podemos ajustar adecuadamente la estructura de la turbina y aumentar el diámetro del ventilador para que se pueda transferir más energía del gas al conducto exterior a través del ventilador. Esto puede evitar aumentar la velocidad de escape y lograr eficiencia térmica. El equilibrio entre la eficiencia de la propulsión y la eficiencia de la propulsión mejora en gran medida la eficiencia del motor. Los motores basados ​​en este principio, como los motores de alta relación de derivación, se utilizan ampliamente en aviones de pasajeros y de transporte porque su resistencia y sus costes económicos son relativamente buenos. Para lograr un rendimiento de velocidad, los aviones de combate modernos generalmente utilizan motores turbofan con relación de derivación baja.