Mantener abrigado para prevenir infecciones.
Mantener abrigados a los recién nacidos y prevenir infecciones son los puntos clave. Tu piel es delicada y necesita mantenerse limpia. El perineo y las nalgas deben lavarse con frecuencia. Intenta ducharte todos los días. Lave las partes superior e inferior del cuerpo por separado antes de que se caiga el cordón umbilical y báñese después de que se caiga. Es recomendable utilizar jabón no irritante y secar con una toalla suave después del baño. No es recomendable limpiarlo ya que puede dañar fácilmente la epidermis.
La ropa debe ser suave y cómoda.
La ropa debe ser suave y cómoda y cambiarse todos los días. Mantenga sus fosas nasales despejadas. Si hay moco nasal, utilice un hisopo de algodón empapado en agua tibia para eliminarlo suavemente, ya que los recién nacidos no abren la boca para respirar debido a la congestión nasal, lo que les provocará dificultad para respirar.
Cuidado del cordón umbilical
Cuidar bien el cordón umbilical puede prevenir infecciones. El muñón del cordón umbilical generalmente se cae entre 3 y 10 días después del nacimiento. El cordón umbilical no se envuelve en gasa para ayudar a que se seque y se caiga. Utilice un hisopo de algodón con alcohol al 70% para frotar el ombligo y la piel circundante 1 o 2 veces al día. Es normal que la raíz umbilical esté mojada cuando se cae por primera vez. Puedes limpiarla localmente con un algodón con alcohol y dejarla secar. Si tiene secreción purulenta del ombligo o la piel alrededor del ombligo se enrojece, consulte a su médico.