¡Alerta de Juguete!
Los niños valoran mucho sus juguetes. Si cometen un error, su amado juguete puede ser entregado temporalmente a otro niño y no recibirán un reemplazo nuevo. Esto se hace para que los niños comprendan que cada acción tiene consecuencias y responsabilidades.
¡Experto en tareas domésticas!
Permitir que los niños participen en tareas domésticas sencillas no es castigarlos, sino permitirles apreciar el arduo trabajo de sus padres. De esta manera, los niños aprenderán a valorar los frutos de su trabajo y ya no ensuciarán la casa. También hágales saber que si no les va bien, pueden ser castigados como en la escuela.
¡Privilegios suspendidos!
Los niños esperan con ansias ir al patio de recreo o disfrutar de juguetes nuevos y pasar tiempo frente a la televisión. Pero si un niño comete un error, como padres podemos intentar quitarle temporalmente algunos de sus privilegios. Esto es para que los niños se den cuenta de que si no corrigen sus errores, perderán el trato que merecen. Por supuesto, como padres, debemos mantenernos firmes, no ser blandos y ayudar a nuestros hijos a tomar el camino correcto.