1. Falta de concienciación sobre la salud: Colocar zapatos en todos lados puede provocar problemas de salud y aumentar el riesgo de propagación de bacterias y virus.
2. Falta de orden y disposición: Esto demuestra que la gestión del centro de educación infantil no es lo suficientemente estricta y no existe ningún requisito de que los zapatos se coloquen en los lugares designados.
3. Riesgo de seguridad: si los zapatos se colocan al azar, los niños o adultos tropezarán y caerán, lo que plantea ciertos riesgos de seguridad.