Diversas formas de nueva energía provienen directa o indirectamente de la energía térmica generada por el sol o el interior de la tierra. Esto incluye la energía generada a partir de energía solar, eólica, de biomasa, geotérmica, hídrica y oceánica, así como biocombustibles e hidrógeno derivados de fuentes de energía renovables. También se puede decir que la nueva energía incluye diversas energías renovables y energía nuclear. En comparación con la energía tradicional, la nueva energía generalmente tiene las características de menos contaminación y grandes reservas, lo cual es de gran importancia para resolver los graves problemas de contaminación ambiental y de agotamiento de los recursos (especialmente la energía fósil) en el mundo actual. Al mismo tiempo, debido a que muchas nuevas fuentes de energía están distribuidas uniformemente, también es de gran importancia para resolver las guerras causadas por la energía.
Según afirma el mundo, recursos como el petróleo y las minas de carbón disminuirán a un ritmo acelerado. La energía nuclear y la energía solar pronto se convertirán en las principales fuentes de energía.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) divide la nueva energía en las siguientes tres categorías: energía hidroeléctrica grande y mediana; nueva energía renovable, incluida la pequeña energía hidroeléctrica, la energía solar, la energía eólica, la energía moderna de biomasa y la geotérmica. energía y energía oceánica Energía; energía de biomasa penetrante.