En primer lugar, no hay ningún propósito. En primer lugar, los estudiantes universitarios comunes y corrientes no tienen un plan perfecto para su vida porque no tienen ningún propósito. Entonces, en la universidad, después de terminar sus cursos, se vuelven perezosos y se quedan en el dormitorio los fines de semana y no salen a ninguna actividad social.
En segundo lugar, el círculo social es pequeño. Cada fin de semana, algunos estudiantes universitarios jugarán con sus teléfonos móviles en el dormitorio. Su círculo social es más pequeño porque no tienen más amigos con quienes pasar el fin de semana. También hay algunos estudiantes en la universidad que invitan a sus amigos a viajar todos los fines de semana, o van a algunos restaurantes o lugares de entretenimiento de los alrededores. Los dos grupos juntos son un marcado contraste.
En tercer lugar, para estos estudiantes universitarios comunes, lo más importante es que estén orientados a la familia, lo cual está relacionado con su estado psicológico. No les gusta salir a socializar o jugar con otros. Sólo quieren un espacio propio y tranquilo. De hecho, no hay nada de malo en este tipo de situación de vida, siempre y cuando completes bien tus tareas de estudio durante la universidad.