1. La primavera ya está aquí y nuestra escuela celebrará una reunión deportiva de primavera. Hemos estado esperando y esperando con ansias este día.
2. Por la mañana, después de comer, llegué feliz al colegio. Tan pronto como entré a la escuela, vi a muchos estudiantes preparándose para la competencia en el patio de recreo: algunos practicaban correr, algunos practicaban salto de longitud, algunos practicaban saltar la cuerda y algunos practicaban salto de altura.
3. Alrededor de las ocho comenzó oficialmente el encuentro deportivo. Los dos estábamos emocionados y nerviosos. Tengo dos eventos, el primero es el salto de longitud, el segundo es la competencia de relevos, el primero es la competencia de salto de longitud, la maestra nos dijo que cada uno de nosotros tiene tres oportunidades y me siento aliviado. No bailé bien las dos primeras veces y pensé: ¡Si no bailo bien, mis compañeros se reirán de mí o se rendirán! Luego pensé de nuevo, sería una lástima que me diera por vencido ahora, y sería un obstáculo para la clase. No, debo trabajar duro la tercera vez. Después de fortalecer mi confianza, trabajé duro. Con el apoyo de mis compañeros, apreté los puños y me concentré en correr. Cuando casi corrí hacia el arenal, usé todas mis fuerzas y salté. Ah, esta vez mis notas fueron mejores. que las dos veces anteriores. Mis compañeros de clase estaban todos felices por mí y me aplaudieron uno tras otro.
4. La siguiente prueba es la carrera de relevos. El profesor nos llevó a la línea de salida y nos explicó las reglas de la competición. Estaba en el primer grupo de la carrera de relevos. Se escuchó un disparo y empezamos a correr rápido. Los compañeros me persiguieron y no mostraron signos de debilidad. A mitad de la carrera estaba sudando profusamente, jadeando, tenía las piernas entumecidas y no tenía fuerzas para nada. Oh, realmente ya no quiero correr, pero cuando escucho los aplausos de mis compañeros de clase, siento que no puedo rendirme. Mis compañeros de clase confían en mí y me eligen como el representante de la clase para competir. resultados y perseverar. Corrí con todas mis fuerzas, y en medio de los gritos de mis compañeros, finalmente llegué primero a la meta. Finalmente, con el esfuerzo conjunto de nuestros compañeros, nuestra clase ganó el primer lugar.
5. Nuestra clase logró muy buenos resultados en este encuentro deportivo, pero no debemos estar orgullosos. Debemos practicar más y esforzarnos por lograr mejores resultados el próximo año.