Seis métodos de autogestión que merecen una seria perseverancia
Gestión por objetivos
Establezca una meta. Encuentra tu misión en la vida y comprende lo que te gusta y en lo que eres bueno. Aprenda a establecer metas y desglosarlas.
Formula adecuadamente tus objetivos a largo plazo, objetivos a medio plazo y objetivos a corto plazo, y formula los planes de trabajo correspondientes.
Cíñete a tus objetivos. Utiliza tu energía en las áreas que sean más adecuadas para ti y profundiza en ellas.
Gestión del tiempo
Mantener una sensación de crisis sobre el tiempo. Reconoce el significado del tiempo y trátalo como tu cosa más preciada. Adquiera el hábito de planificar su tiempo.
Haz las cosas más importantes cuando tengas la mejor energía, y desarrolla el hábito de planificar tu trabajo según tu horario.
Domina las habilidades de utilizar bien tu tiempo. Utilice tiempo fragmentado para maximizar el valor de cada día.
Gestión del Conocimiento
Reconocer el valor del conocimiento. A lo largo de tu vida, debes mantener el hábito de aprender, aprender más sobre el conocimiento en diferentes campos y formar un marco.
Ama aprender, recarga tu cerebro constantemente y conviértete en un experto en uno o más campos.
Gestión de la voluntad
Afrontar la vida con una sonrisa. Fortalécete y superate constantemente en el proceso de superación de las dificultades. Ten una fe fuerte.
Mantén tus ideales y objetivos en mente y nunca te rindas fácilmente. Aprenda a ser paciente y persistente.
Sé paciente cuando te sientas solo, persevera cuando estés confundido, sé amable contigo mismo en los días temporalmente difíciles y enciende una lámpara de corazón en la noche oscura.
Gestión Interpersonal
Cuidar sinceramente a los demás y ponerse en el lugar de los demás. Aprenda a cooperar con los demás. Aprende a compartir y asumir responsabilidades, y disfruta luchando por un mismo objetivo.
Aprende a ser tolerante. Sea bueno controlando sus emociones, comuníquese con sinceridad y sea tolerante con los demás.
Gestión de la mentalidad
Ten confianza. Cree en tus capacidades y afronta cada día con confianza. Sea positivo.
Piensa positivamente cuando suceden cosas, toma la iniciativa para aprovechar las oportunidades y sé la persona más brillante, positiva y optimista entre la multitud.
Ten calma. Ríete de las perturbaciones, de los altibajos de la vida, sin ser impaciente ni impaciente ni lento.