Parte, más que conocimiento en sí.
2. Aprender a hacer: dotar a los estudiantes de la capacidad de trabajar en un entorno determinado.
La fortaleza es la capacidad integral que incluye cómo afrontar las dificultades, resolver conflictos, organizarse y gestionarse, y asumir riesgos.
3. Aprender a vivir juntos - dejar que los alumnos aprendan a ponerse en su lugar y comprenderlo.
Personas, eliminando así las barreras, prejuicios y hostilidad entre sí, viviendo en armonía con las personas que los rodean y cultivando el espíritu de unidad y cooperación de los estudiantes desde una edad temprana para lograr objetivos y planes comunes.
4. Aprender a ser: para adaptarse a los rápidos cambios y al desarrollo de la sociedad, los estudiantes deben aprender a dominar.
Las habilidades básicas para controlar el propio destino, a saber, pensamiento, juicio, imaginación, expresión, control emocional e interacción social.
La capacidad de afrontar. Estas habilidades no sólo son necesarias para que los individuos mejoren su propia personalidad, sino que también las necesitan los individuos para desarrollarlas como miembros de la sociedad.
La autonomía y la iniciativa son las garantías de la innovación y la creación.