No es rico.
Maine está relativamente desarrollado industrialmente, con algunas industrias importantes como la del papel, la madera, la fabricación de calzado y el procesamiento de alimentos, pero en general no se considera una región rica. Según los datos, Maine es uno de los estados más pobres de Estados Unidos y tiene una tasa de crecimiento económico relativamente baja. También existen desafíos en términos de ingreso per cápita y oportunidades de empleo. La región tiene excelentes universidades y recursos educativos y varias otras ventajas, pero desde una perspectiva económica general, no puede clasificarse como una región rica.