Algunas personas pueden sentirse satisfechas y orgullosas de asistir a la escuela de posgrado porque han adquirido conocimientos académicos más profundos y capacidades de investigación, han mejorado su competitividad laboral o han logrado sus objetivos académicos y profesionales.
También hay algunas personas que pueden arrepentirse de haber ido a la escuela de posgrado, tal vez porque sienten que su inversión en la escuela de posgrado no les ha brindado los retornos esperados, o porque descubren que sus intereses y objetivos no coinciden con aquellos. de la escuela de posgrado.
Cualquiera que sea la situación, es importante darse cuenta de que las experiencias y elecciones de cada persona son únicas y que no existe una respuesta "correcta" establecida. Si se arrepiente o le preocupa estudiar un posgrado, se recomienda que reflexione sobre sus motivaciones y objetivos, evalúe sus intereses y planes profesionales y busque el apoyo y asesoramiento adecuados para ayudarle a tomar una decisión informada.