Ahora, permítanme hacer un balance de los tres métodos educativos más ineficaces y repugnantes para los niños. 1. Sólo está relacionado con el rendimiento académico del niño
Una vez fui a casa de una amiga a jugar, y su hijo llegó del colegio y le dijo alegremente: “Mamá, hubo un tira y afloja”. competencia de guerra hoy, y nuestra clase ganó el primer lugar. Mi buen amigo escuchó distraídamente y de repente dijo: "¿Recibiste los resultados de las pruebas de la semana pasada? ¿Qué puntuación obtuviste? En un instante, pareció que le habían echado agua fría al niño". él, y ya no estaba de humor para hablar.
Algunos padres también prohíben a sus hijos realizar todas las actividades de ocio los domingos y les dejan quedarse en casa leyendo libros. Aunque los resultados de los exámenes son fundamentales, el mundo de los niños debería ser diverso. Además de los resultados de los exámenes, también necesita ampliar sus conocimientos, hacer amigos y hacer ejercicio.
Los padres solo prestan atención a los puntajes de los exámenes de sus hijos y solo se comunican con sus hijos sobre los puntajes de los exámenes. Este tipo de comportamiento no promueve fácilmente el progreso del aprendizaje de los niños. Al contrario, sin darse cuenta, ejerce demasiada presión sobre los niños, provocando ansiedad psicológica y emocional en los niños. Los niños también se resistirán a hablar con sus padres e incluso se resistirán a aprender y entrenar. Este tipo de educación cultural es el más ineficaz.
2. Ironía y sarcasmo
El niño de al lado le dijo que su madre iba a realizar una reunión de padres y profesores. Su madre dijo sin ceremonias: Le fue muy mal en el examen, pero aun así tuvo el descaro de pedirme que fuera y pedirle a tu papá que fuera también. Tu padre es muy liberal.
Los niños informan a sus padres y los padres aceptan. Decir algunas palabras desagradables no solo dañará la comunicación entre padres e hijos, sino que también transmitirá una actitud negativa hacia los niños, haciéndoles perder la confianza en sí mismos. No solo destruirá la autoestima de los niños, sino que también los hará sentir. profundamente frustrado. A medida que crezco, me deprimo cada vez más y tengo menos confianza, y es muy fácil llegar a los extremos cuando pienso en los problemas.
En lugar de ridiculizar a los niños por su ignorancia, es mejor darles más incentivos y darles una buena actitud. No hay duda de que el niño es muy diligente e interesado. Hable más con su hijo, trate de profundizar en su psicología y comprenda lo que piensa.
3. Con exceso de trabajo y sin ganas de dejarlo ir.
Muchos padres están ansiosos por amar a sus hijos y nunca mirar atrás, todo porque no están dispuestos a dejar que sus hijos soporten el dolor de crecer y no pueden ver que sus hijos tomen más turnos. Los niños aprenden a ayudar a empacar y transportar mochilas escolares.
Cuando sus hijos postulan a carreras técnicas, los padres investigan qué campo es el más popular; cuando sus hijos encuentran trabajo, siempre están preocupados por su sufrimiento cuando sus hijos quieren casarse, lo intentan; asignar citas a ciegas tanto como sea posible, etc.
Entonces todo ayuda, y el lugar donde el niño tiene la oportunidad de desarrollarse de forma independiente será con el tiempo sustituido por el mundo.