Érase una vez, a los ojos de mucha gente, ser profesor era un trabajo ideal, sin preocupaciones de comida y bebida y dos largas vacaciones. En comparación con otros trabajos, los profesores tienen ventajas incomparables. Convertirse en profesor se ha convertido alguna vez en el objetivo de muchas personas. Pero incluso con un trabajo tan ideal, un joven de Hunan renunció por iniciativa propia. Después de dimitir, regresó a su ciudad natal para convertirse en agricultor, lo que desconcertó a mucha gente.
Sin embargo, el autor piensa que este joven profesor es muy admirable y su valentía es encomiable. En cuanto al resultado, creo que sería muy considerado. Para dar un paso atrás, como joven, ¿qué pasará si fracasas una vez? El fracaso es inevitable en la vida. Para la meta en tu corazón, no hay nada que temer incluso si fallas. Como dice el refrán, el fracaso es la madre del éxito. Un arco iris que no ha experimentado el viento y la lluvia no será brillante ni hermoso.
Los jóvenes, que tienen un trabajo estable, aunque no se preocupan por la comida y el vestido, y aunque se sienten más cómodos, un trabajo así también hará que sus vidas pierdan más brillo y valor para explorar y explorar. Innovar no es solo Le brindará la alegría del éxito, enriquecerá su experiencia de vida y la hará más interesante. ¿No es más delicioso saborear el fracaso de vez en cuando, como una taza de café amargo después de beber leche dulce? Por eso la valentía de este joven maestro es encomiable. También creo que lo logrará.
Se dice que este profesor de secundaria dimitido regresó a su ciudad natal para montar una cooperativa porque en su ciudad natal se cultivaba vid. Después de su regreso, integró recursos e hizo que la industria de la uva en su ciudad natal fuera más grande y más fuerte. Esto no solo respondió al llamado del país, sino que también hizo cosas buenas para familiares y amigos en mi ciudad natal, lo que llevó a todos a enriquecerse juntos y, al mismo tiempo, también me hizo tener más éxito en mi carrera. Como joven, valía la pena intentar este desafío.
Por supuesto, todo tiene dos lados, y nadie puede garantizar que tendrá éxito, incluido él mismo, pero como ex maestro, debe haber hecho un plan para sí mismo, incluido qué hacer después del fracaso. Un plan así no traerá mala suerte, no porque haya tenido un mal comienzo, sino porque está bien planificado. Sólo pensando en cada detalle y haciendo los arreglos y preparativos adecuados, las posibilidades de éxito serán mayores.
En cualquier caso, se necesita coraje por parte de un joven tan joven y emprendedor para dar este paso, y espero que todos puedan darle más aliento y apoyo. También tenemos razones para creer que después de regresar al campo, podrá utilizar sus conocimientos y recursos para promover el desarrollo rural y lograr sus objetivos.
Como dice el refrán, lo importante en la vida no es el resultado, sino el proceso. Mientras el proceso sea maravilloso, ¿por qué preocuparse por el resultado?