El verdadero valor de la relación padre-hijo
El verdadero valor de la educación familiar radica en el establecimiento y mantenimiento de la relación padre-hijo. Los padres deben centrarse en la comunicación con sus hijos y cultivar la confianza en sí mismos y la independencia de sus hijos, en lugar de perseguir el llamado "éxito" de sus hijos mediante el control y los mimos.
Respeto al trabajo y al trabajo duro
La educación debe centrarse en cultivar el respeto de los niños por el trabajo y el trabajo duro. La historia de Ran Junchao nos dice que sólo a través del trabajo duro y la dedicación podemos lograr un éxito real y una sensación de logro.
Heredar valores positivos
La sociedad moderna muchas veces ignora algunos valores positivos, como el respeto por el trabajo, la gratitud y la dedicación. Estos valores deben transmitirse a la próxima generación, para que los niños puedan aprender a ser agradecidos, dedicados y respetuosos cuando crezcan.