Aunque el Ministerio de Educación estipula que no se puede pedir a los padres de alumnos de primaria y secundaria que corrijan los deberes, esto no significa que los padres no tengan responsabilidad educativa sobre sus hijos. La educación escolar por sí sola no es suficiente. Sólo una buena educación cooperativa entre el hogar y la escuela puede permitir que los estudiantes de primaria y secundaria crezcan mejor.
Entonces, ¿cómo deberían trabajar juntas las escuelas y las familias para promover el crecimiento saludable de los niños?
En primer lugar, desde una perspectiva familiar, los padres son los primeros maestros de sus hijos y sus comportamientos tendrán un impacto sutil en sus hijos. Por lo tanto, los padres deben utilizar acciones prácticas para animar a sus hijos, no solo palabras, como los padres juegan mahjong en casa, sino dejar que sus hijos aprendan. Es obvio que la mayoría de los niños realmente no escuchan. Pero si los padres también estudian cuando los niños estudian, a la larga, los niños recordarán el comportamiento de sus padres en sus corazones, lo que tendrá un buen impacto en los niños. Además, los padres deben cultivar la calidad moral de sus hijos, empezando por las pequeñas cosas. No hacer ruidos fuertes en lugares públicos, no tirar basura, ser amable con los demás, etc. Los estudiantes de primaria y secundaria se encuentran en un período crítico para establecer sus valores, y este comportamiento de los padres afectará sutilmente el comportamiento futuro de sus hijos.
Desde la perspectiva de la escuela, la escuela es el segundo hogar del niño y la escuela debe cumplir con sus responsabilidades. Primero, los maestros de escuela no deben escatimar esfuerzos para enseñar conocimientos a los estudiantes y, al mismo tiempo, deben aprender a pensar y ser flexibles en el pensamiento. Esto no solo afectará el desempeño actual de los estudiantes, sino que también será de gran ayuda para los estudiantes que ingresan a la sociedad. en el futuro. En segundo lugar, los estudiantes pasan la mayor parte de su tiempo en la escuela. Las escuelas deben establecer un buen espíritu escolar, crear una buena atmósfera de aprendizaje y buenas condiciones de aprendizaje para los estudiantes. En tercer lugar, los profesores deben cumplir con su deber. Corregir la tarea en persona puede permitirle al maestro saber dónde faltan conocimientos de los estudiantes, lo que los impresionará. El maestro también puede mantenerse al día, comprender mejor el contenido de la enseñanza y mejorar la capacidad de enseñanza del maestro.
La familia y la escuela, ambas indispensables, pueden tener un impacto en los niños. Por lo tanto, las escuelas y las familias deben tener una buena cooperación para brindar a los niños una educación integral.