Como nuevo presidente de Estados Unidos, el carácter de Biden y sus características de comportamiento en la toma de decisiones pueden afectar en gran medida la formulación de las políticas internas y exteriores de Estados Unidos. Por lo tanto, este artículo analiza los rasgos de personalidad de Biden y encuentra que la amabilidad y la extroversión positiva son las dos características centrales de Biden, mientras que siguiendo la tendencia, la perseverancia y la agresividad son sus tres características importantes. Debido a que los rasgos centrales tienen un impacto más significativo en la toma de decisiones conductuales, la orientación interpersonal y el bajo dominio relacionado con la amabilidad, y la orientación de negociación relacionada con la extraversión positiva son los tres rasgos centrales de la toma de decisiones de Biden. Otras dos características importantes de las decisiones son la adaptación a las limitaciones y la orientación a corto plazo. Con base en estos hallazgos, es necesario explorar más a fondo los siguientes temas:
En primer lugar, los rasgos positivos de la personalidad no necesariamente significan un diseño de políticas eficiente y una postura política cooperativa. El desempeño de Biden en las dimensiones de personalidad de los Cinco Grandes es en su mayoría positivo, más acorde con las expectativas psicológicas de la gente sobre la imagen de los políticos estadounidenses tradicionales. Sin embargo, en situaciones políticas, las características “positivas” no implican necesariamente un diseño de políticas eficaz. Por ejemplo, una orientación interpersonal puede significar que Biden está demasiado preocupado por la evaluación de los efectos de las políticas por parte del mundo exterior y le resulta difícil implementar políticas transformadoras. Un bajo dominio también puede significar que Biden carece de control sobre la situación general y tiene dificultades para coordinar diferentes grupos de interés y diferentes departamentos gubernamentales. Además, la caracterización “positiva” no significa que el enfoque de Biden hacia la resolución de conflictos sea moderado. Por ejemplo, Biden, que es del tipo negociador, puede aumentar la presión sobre sus oponentes manteniendo los canales de comunicación, y entonces habrá una situación en la que la competencia se intensificará y las negociaciones se abrirán.
En segundo lugar, el estilo de gobierno de Biden y su continuidad. Después de asumir como presidente, Biden mostró un estilo de gobierno completamente diferente al de Trump. Su origen y continuidad se pueden explorar a partir del carácter y las características de toma de decisiones de Biden. En primer lugar, su personalidad positiva y extrovertida y su deseo de motivación indican que Biden está más abierto a un debate social abierto y sustantivo. Específicamente, Biden muestra un estilo de comunicación pragmático y tiende a creer que las discusiones públicas que promueven agendas políticas pueden ayudar a resolver problemas. Biden está dispuesto a hablar abiertamente sobre los serios desafíos que enfrenta Estados Unidos y rara vez se niega a admitir o ocultar información sobre temas desafiantes como la epidemia. El equipo político de Biden reconoció públicamente que Estados Unidos se encuentra en medio de "cuatro crisis superpuestas" de la epidemia del nuevo coronavirus, la crisis económica, el cambio climático y la igualdad racial, y formuló políticas basadas en esto. En segundo lugar, el estilo de adaptación de las restricciones en la toma de decisiones de Biden determina su actitud hacia las restricciones externas. Tiende a respetar los desafíos externos y aprender de proyectos políticos probados. En los primeros días de su administración, Biden imitó fuertemente los planes de gobierno y el estilo de comunicación pública del presidente Franklin Roosevelt, lo que puede reflejarse en su experiencia exitosa en la respuesta a las crisis. Por un lado, tras asumir el cargo, Biden propuso el "New Deal de 100 Días" y el "Plan de 10 Días" y promovió la introducción de un plan de estímulo de 65.438 dólares + 0,9 billones de dólares para hacer frente a la depresión económica, indicando que por otro lado, está tratando de unir y movilizar fuerzas sociales para responder a la crisis bajo el liderazgo del gobierno. Por un lado, Biden imitó las "charlas privadas" de Roosevelt con la esperanza de crear una imagen pública a favor de la paz; A juzgar por los rasgos de carácter de Biden, se puede esperar que su estilo de gobierno pragmático y amigable con la gente tenga mayor continuidad.
En tercer lugar, ¿cómo afectan las características psicológicas de Biden al futuro diseño estratégico de Estados Unidos? El diseño estratégico de la administración Biden ya ha surgido inicialmente. A partir de sus características psicológicas, podemos comprender de manera más sistemática la fuerza impulsora interna de su diseño estratégico. Primero, los altos niveles de empatía hacia las poblaciones vulnerables y las primeras prioridades de Biden en el cargo. La simpatía por los desvalidos es un aspecto importante de la amabilidad y la simpatía de Biden, que da forma a su visión de cómo funciona el gobierno. Biden aboga por que el gobierno asuma plenamente las responsabilidades sociales y ayude a los grupos desfavorecidos de la base de la sociedad. En los primeros días de su toma de posesión, ante la recesión económica provocada por la epidemia del nuevo coronavirus, Biden se comprometió a restaurar la confianza de la gente en el gobierno y propuso un paquete de rescate y un plan para promover el empleo para la gente de abajo. En segundo lugar, priorizar los mecanismos de defensa de autosublimación y el desarrollo interno. La superación personal es un aspecto importante en el que insiste Biden, es decir, cuando encuentra dificultades, Biden tiende a reflexionar sobre sí mismo y no es agresivo. Esta característica inherente significa que Biden considera la superación personal como la forma fundamental de resolver los problemas, lo que ha afectado en gran medida las opiniones de Biden sobre los asuntos internos y las relaciones exteriores. Específicamente, afirmó claramente que la política exterior debe servir a los asuntos internos. Prestar atención al desarrollo de los propios Estados Unidos es un rasgo distintivo de la administración Biden. La epidemia de COVID-19, el clima, la igualdad racial, la economía, la atención médica, la inmigración y la restauración del estatus global de Estados Unidos son los siete temas prioritarios enumerados en el sitio web de la Casa Blanca, de los cuales los primeros seis son principalmente asuntos internos. En tercer lugar, la analogía entre estatus interpersonal y estatus internacional.
La personalidad afable, positiva y extrovertida de Biden y sus características de toma de decisiones interpersonales reflejan su gran necesidad de un estatus interpersonal amigable y recompensas interpersonales, lo que a su vez afecta el establecimiento de prioridades de política exterior de Biden. En los primeros días de asumir el cargo, Biden hizo de la mejora del estatus internacional de Estados Unidos un objetivo prioritario de su política exterior y puso gran énfasis en el liderazgo global de Estados Unidos. En su primer discurso de política exterior tras asumir el cargo y en su discurso en la Conferencia de Seguridad de Múnich, Biden enfatizó que "Estados Unidos ha vuelto" y asumirá sus debidas obligaciones con los aliados occidentales y participará en la gobernanza global.