No hace falta decir que los malos resultados han demostrado seriamente el hecho de que el gobierno tiene escasez de dinero, el impuesto sobre la renta está lejos de ser suficiente para el consumo, el gobierno derrocha y tiene que pedir dinero prestado al pueblo.
Hay un dicho que dice que nadie puede impedir que el gobierno se vuelva corrupto. Si tiene dinero, preferirá prestar dinero a particulares a tipos de interés elevados que comprar bonos gubernamentales de menor riesgo.