Las copas esmaltadas, al igual que las cerillas, son productos nostálgicos descoloridos y los fabricantes escasean.
Los productos hechos a mano tienen procesos complejos y la calidad no puede ser uniforme. Los productos incompletos son hermosos.
Es normal tener algunas burbujas, desconchones y baches.
En nuestra memoria, las tazas esmaltadas siempre tienen el hueso y tienen el sabor de la infancia.
El esmalte es un material compuesto que se recubre con una o más capas de esmalte sobre la superficie del metal y se une firmemente mediante reacciones físicas y químicas después de la cocción. Solía llamarse esmalte. Tiene la resistencia mecánica inherente y las propiedades de procesamiento del metal, así como la resistencia a la corrosión, la resistencia al desgaste, la resistencia al calor, la no toxicidad y las propiedades decorativas del recubrimiento. El esmalte se originó a partir del vidrio para decorar el metal.
Vea la imagen a continuación para ver la apariencia: