Métodos/Pasos
1
La profesión de locutor tiene una particularidad, es decir, la radiodifusión es el último paso en la producción de programas de televisión. La televisión es un arte con imágenes y los locutores han tomado prestada esta característica de la televisión para convertirse en figuras públicas. La imagen pública de nuestros locutores de televisión es diferente a la de los actores o cantantes de cine y televisión. Los actores y cantantes de cine y televisión son animadores y artistas, y los locutores son periodistas y portavoces del partido y del pueblo. La tarea del locutor es dar a conocer la línea, los principios y las políticas del partido, reflejar los deseos y las voces del pueblo, promover modelos avanzados y promover el atraso. Es constructor y partidario de la construcción de la civilización espiritual socialista. Los locutores deben mantener siempre la conducta de un periodista proletario: objetivo, justo, generoso, preocupado por la audiencia, culto, amigable y natural.
Si el locutor no puede contenerse y conducirse con buena profesionalidad y ética profesional, no podrá cumplir bien su misión. Hay muchos locutores excelentes en nuestro equipo, como Jing Yidan, Shui Junyi, Bai, etc. A su alrededor se refleja buena profesionalidad y ética. Jing Yidan se preocupa por la gente y habla por ella; Shui Junyi es objetivo y justo y puede arriesgar su vida para cubrir noticias en el campo de batalla en Irak. Bai tiene un alto nivel de profesionalismo y un estilo humilde, agudo y riguroso. Al mismo tiempo, también podemos ver que algunos locutores y conductores son arrogantes y soberbios, pensando que estar en la televisión significa que son superiores a los demás, algunos conductores posan en la pantalla, son vulgares y aburridos, y no reconocen sus responsabilidades; y algunos locutores sólo lo hacen. Un altavoz no tiene alma ni vida en su voz. La aparición de estos fenómenos es que el espíritu profesional y la ética profesional de los locutores no se comprenden ni captan bien.
Como periodista, el locutor no sólo debe tener las cualidades que debe tener un periodista, sino también tener una buena profesionalidad y ética profesional. Sólo así podrá captar mejor la dirección de la publicidad, la intención de los editores, la corrección de su propia expresión, mantenerse al día con el ritmo de los tiempos y dar a conocer el tema principal de la época.