Revelando los secretos de las escuelas públicas británicas: el palacio educativo de los aristócratas y las élites

Las escuelas públicas inglesas británicas, como su nombre indica, no son escuelas públicas, sino escuelas secundarias privadas para la élite social. Estas escuelas están indisolublemente ligadas a la familia real, y algunas fueron establecidas por personas adineradas de la sociedad para brindar una educación de calidad a sus hijos.

Escuelas aristocráticas

La historia de las escuelas públicas se remonta al período en que se brindaba educación a niños de familias pobres o comunes. Pero con el paso del tiempo, las escuelas públicas se convirtieron gradualmente en escuelas aristocráticas y la condición básica para la admisión ya no eran las tasas de matrícula, sino los antecedentes familiares. La escuela evaluará estrictamente si la familia del solicitante cumple con el temperamento aristocrático o de clase media de la escuela para decidir si admite al estudiante.

Internados para varones

Las primeras escuelas públicas eran todas internados para hombres y los estudiantes debían vivir en el campus durante sus estudios. Este sistema de internado no sólo favorece el aprendizaje de los estudiantes, sino que también ayuda a cultivar su independencia y capacidad de autocuidado.

Representantes de la educación de élite

Las escuelas públicas se han convertido en importantes representantes de la educación de élite en el Reino Unido, y su elevado estatus es insustituible en todo el sistema educativo británico. Cada escuela pública tiene su propio estilo de gestión y filosofía educativa, y los estudiantes que produce son talentosos y muy visibles.

Estilo de gestión y filosofía educativa

Cada escuela pública tiene su propio estilo de gestión y filosofía educativa únicos. Estas escuelas se centran en el desarrollo integral de los estudiantes, no sólo en el rendimiento académico, sino también en el cultivo del carácter moral, la etiqueta y las habilidades sociales de los estudiantes.

Ingreso a la Universidad

Los estudiantes de escuelas públicas suelen optar por ingresar a la universidad a los 19 años. La calidad de la educación pública es ampliamente reconocida y sus estudiantes obtienen excelentes resultados en los exámenes de ingreso a la universidad.