Lego no es sólo un simple juguete con bloques de construcción, sino una herramienta educativa que fomenta la creatividad y la imaginación. Lego cultiva la paciencia, la concentración y la perseverancia de los niños. Montar un modelo LEGO complejo requiere paciencia y concentración, pieza por pieza, hasta completarlo. Este proceso ayuda a los niños a desarrollar la cualidad de no darse por vencidos fácilmente cuando enfrentan desafíos.
¿Qué espíritu necesita Lego?
Paciencia, concentración y perseverancia.