1. Porque la educación rompe nuestro sentido común, complica problemas simples y no se ajusta a la forma en que la gente común ve las cosas.
2. Porque la educación nos aleja de la practicidad. Cuanto más educadas sean las personas, más valorarán la construcción teórica, la popularización y el pensamiento creativo, ignorando la transferencia de habilidades prácticas. Cuando el mundo llegue a su fin, las personas más educadas estarán entre las primeras en ser eliminadas.
3. La educación nos hace desviarnos de nuestros ideales. La educación sirve a la élite más que a la verdad y es un disfraz y un sistema para el poder. Si realmente quieres aprender algo, lo primero que debes hacer es abandonar la escuela.
La educación nos hace perder otras cosas además de la humanidad. En términos generales, las personas educadas siempre están desconectadas de la vida pública y no pueden comprender los sentimientos de la gente corriente. Son solitarios y susceptibles, y sus únicos verdaderos amigos son los polvorientos trabajos académicos, especialmente los textos sin vida.
La educación nos ha entumecido el corazón. La educación hace que la gente piense demasiado y se olvide de sentir. Las personas educadas se vuelven más abstractas que prácticas. Tienen lógica pero les falta emoción. Cuanto más aburridos parecen, más se gustan a sí mismos.
6. La educación nos desmoraliza. Lo mismo ocurre con los profesores, que siempre han tenido que aceptar el hecho de que se sienten infelices y decepcionantes todo el día, y que su único propósito en la vida es incomodar a los estudiantes que se sienten fácilmente satisfechos consigo mismos.
7. La educación nos debilita. Estudiar y vivir mucho tiempo frente a un escritorio nos debilitará.
8. La educación nos vuelve engreídos y complacientes. La pretensión sigue siendo un riesgo laboral para los académicos de hoy. Las personas educadas tienden a pensar que lo saben todo, pero simplemente no nos gustan las personas moralistas.
9. La educación embota nuestra personalidad. No espere que la gente educada esté a la vanguardia de la moda.
La educación nos convierte en esclavos. Las universidades pueden convertirse en cualquier momento en un símbolo de todas las fuerzas más conservadoras de la sociedad, y los académicos se resisten al cambio.
11. Seamos rebeldes. Simplemente se consideró que tenía el potencial de poner a la gente en contra de las instituciones políticas tradicionales.
12. Mantennos en la pobreza. El aprendizaje sólo traerá beneficios a quienes dejen atrás la teoría, la búsqueda infinita de la verdad y la investigación puramente teórica en favor del trabajo empresarial e industrial.
La educación nos vuelve arrogantes. Dejémonos mimar y debilitar, haciéndonos pensar que vivir en el mundo es tan seguro como pasar las páginas de un libro.
14. La educación nos hace optimistas. Alienta a las personas a tener ideas locas y extrañas, sin importar cuán completamente la vida real pueda refutarlas.
15. La educación nos vuelve pesimistas. Las personas educadas siempre son quisquillosas e incómodas.
La educación conduce al dogmatismo. Coloca el llamado conocimiento en libros de texto sagrados y formas tradicionales.
17. La educación genera dudas. La educación sólo hace que la gente sospeche más de las cosas.
18. La educación nos pone en la realidad