En segundo lugar, la educación musical ayuda a mejorar la inteligencia de los estudiantes. Las investigaciones muestran que el entrenamiento musical puede mejorar las conexiones neuronales del cerebro y mejorar funciones cognitivas como la memoria, la atención y la creatividad. Además, aprender instrumentos musicales también puede ejercitar la coordinación ojo-mano y la imaginación espacial de los estudiantes.
Además, la educación musical puede promover el desarrollo social de los estudiantes. En las clases de coro, banda o música, los estudiantes colaboran con otros para completar composiciones musicales. Este proceso colaborativo ayuda a desarrollar el trabajo en equipo, las habilidades de comunicación y las habilidades de liderazgo de los estudiantes.
Además, la educación musical también puede ayudar a aliviar la presión de aprendizaje de los estudiantes. Los estudios han encontrado que participar en actividades musicales puede ayudar a los estudiantes a relajarse y reducir la ansiedad y la depresión. Por tanto, la educación musical es de gran importancia para mejorar la salud mental de los estudiantes.
Finalmente, la educación musical puede cultivar el carácter moral de los estudiantes. Al estudiar obras de música clásica, los estudiantes pueden aprender sobre la historia, la filosofía y los valores sociales de diferentes orígenes culturales. Esto les ayuda a formar conceptos morales y códigos de conducta correctos.
En resumen, la educación musical tiene muchos efectos positivos en el crecimiento de los estudiantes. No sólo puede enriquecer el mundo espiritual de los estudiantes y mejorar su calidad general, sino también sentar una base sólida para su vida futura. Por lo tanto, debemos conceder gran importancia al estado de la educación musical en la educación escolar y brindar a los estudiantes más oportunidades de aprendizaje musical.