La composición del tiempo debe ser de unas 300 palabras.

El tiempo es precioso y todos deberían valorarlo. Sólo valorando el tiempo podremos avanzar hacia el camino del éxito. Esto se debe a que el tiempo es justo para todos. Frente a la misma oportunidad, quien pueda aprovechar el tiempo y seguir trabajando duro probablemente tendrá éxito. Por otro lado, las personas que no saben valorar el tiempo tienden a desperdiciarlo.

Cuando Qi Baishi tenía 85 años, un día pintó cinco cuadros seguidos y escribió la inscripción: "Ayer hacía viento y llovía, y estaba inquieto, así que no pinté. Ahora lo compensaré. No quiero estar inactivo ni un día". Qi Baishi. La razón por la que me convertí en un pintor de fama mundial no es solo el trabajo duro, sino que, lo que es más importante, sé cómo usar mi tiempo y no perder ni un solo minuto. Tomemos como ejemplo a Qi Lao.

Lu Xun se advirtió una vez a sí mismo que debía valorar el tiempo: "Perder el tiempo de otras personas equivale a matar gente con dinero; perder el propio tiempo equivale a un suicidio lento. Persistió en escribir y finalmente se convirtió en un maestro". literatura moderna. El Sr. Lu Xun escribió tantos ensayos y novelas en su vida que expusieron la oscuridad del feudalismo. ¿No es la culminación de sus arduos esfuerzos?

¿Cómo veía el tiempo Marx, el gran maestro del proletariado? Nunca dedicó su tiempo a entretenimientos y recreación innecesarios y desenfrenados. Después del trabajo, incluso se tomaba un descanso leyendo un diccionario. De esta manera, finalmente escribió su obra maestra "Das Kapital". Imagínense, si no tuviera esa visión del tiempo, ¿podría haber escrito su obra maestra de ciencias sociales "Das Kapital"?

En la historia, hay innumerables ejemplos de cómo valorar el tiempo y tener éxito, y también hay muchos ejemplos de fracaso debido a la procrastinación y la pérdida de tiempo. Una vez, Napoleón dio a sus soldados un día libre durante una batalla, lo que retrasó el avión de combate y provocó el fracaso de la batalla.

Se puede comprobar que nadie es “rico” en términos de tiempo. Si lo aprecias, tendrás éxito. Si no lo valoras, siempre quedarás excluido del éxito.

¡Apreciemos nuestra preciosa juventud! Apreciar el tiempo es amar la vida.