1. Sensación física y retroalimentación: Los simuladores virtuales no pueden proporcionar sensaciones físicas reales, como la inercia del vehículo, la vibración y la retroalimentación de la superficie de la carretera, que son muy importantes en la conducción real.
2. Emociones y estrés: En la conducción real, te enfrentarás a diversas condiciones del tráfico y cambios ambientales, que no se pueden restaurar por completo en un simulador virtual. La conducción real también implica la gestión de las emociones y el estrés, algo que los simuladores virtuales no pueden simular.
3. Condiciones reales de la carretera: es posible que el entorno de la carretera proporcionado por el simulador virtual no represente completamente las diversas condiciones de la carretera real, como el flujo de tráfico, las condiciones climáticas y los diferentes tipos de carreteras.