Las dos empresas están afiliadas.
La relación entre Pixar y Disney es que Pixar es una subsidiaria de propiedad total de Disney. En 2006, Disney adquirió Pixar por 7.400 millones de dólares. Aunque Pixar pasó a formar parte de Disney, mantuvo el nombre "Pixar Animation Studios" y continuó produciendo y distribuyendo películas animadas como marca independiente. Esta asociación permite a Pixar aprovechar la red de distribución y los recursos de marketing de Disney manteniendo al mismo tiempo su independencia creativa y de producción.