Si bien el inglés de escritorio puede ser una comodidad en algunas situaciones, también debemos tener cuidado al respecto. Después de todo, esta forma encubierta de comunicación puede fácilmente malinterpretarse y violar fácilmente las regulaciones en lugares públicos. Especialmente en clases o grandes reuniones de negocios se debe respetar el orden público y las buenas costumbres, y no se debe abusar de los espacios ocultos para mensajes privados o comunicaciones privadas.
Para evitar el abuso de métodos de comunicación implícitos como el inglés debajo de la mesa, necesitamos establecer un mecanismo de comunicación más abierto y transparente. Por ejemplo, en una reunión grande, se puede pedir a los asistentes que hablen en público o que utilicen una sala de chat abierta para comunicarse. Esto no sólo aumenta la transparencia de la comunicación, sino que también reduce malentendidos y problemas innecesarios. Al mismo tiempo, también debemos mejorar nuestra conciencia de escuchar y respetar los discursos y opiniones de los demás, para establecer un entorno de comunicación más racional, igualitario y abierto.