2. Predicar con el ejemplo: los padres son los primeros maestros de sus hijos, y sus palabras y acciones afectarán profundamente a sus hijos. Por lo tanto, los padres deben predicar con el ejemplo y dar un buen ejemplo a sus hijos con su propio comportamiento.
3. Cultivar la independencia: los padres deben animar a sus hijos a pensar y hacer cosas de forma independiente, y cultivar la autonomía y la capacidad de resolución de problemas de sus hijos.
4. Estimular el interés: Los padres deben descubrir y cultivar los intereses de sus hijos, para que los niños se diviertan haciendo las cosas que les gustan, para que puedan aprender y crecer mejor.
5. Establecer una buena comunicación: Debe existir una comunicación abierta y honesta entre padres e hijos, para que los niños se sientan comprendidos y aceptados, estableciendo así una buena relación entre padres e hijos.
6. Establecer expectativas razonables: Los padres deben establecer expectativas razonables en función de la situación real de sus hijos. Las expectativas demasiado altas o demasiado bajas pueden tener un impacto negativo en los niños.
7. Cultivar el sentido de responsabilidad: Los padres deben educar a sus hijos para que asuman responsabilidad y hacerles saber que sus acciones tendrán un impacto en los demás y en la sociedad.
8. Preste atención a la educación del carácter: El cultivo del carácter es más importante que el aprendizaje del conocimiento. Los padres deben prestar atención a cultivar buenas cualidades en sus hijos, como la honestidad, la bondad y el respeto por los demás.
9. Proporcionar un entorno seguro: La familia debe ser un refugio para el alma de los niños, y los padres deben proporcionar a sus hijos un entorno seguro, cálido y libre de estrés para que puedan crecer sanamente.
10. Fomentar los intentos y los fracasos: Los padres deben animar a sus hijos a probar cosas nuevas, brindarles apoyo y aliento incluso si fracasan y dejar que sus hijos comprendan que el fracaso es el único camino hacia el éxito.