Tengo un abuelo que no fue a la escuela por un día. Se unió al ejército a los 18 años. Estudió mucho en el ejército, insistió en leer periódicos y siguió escribiendo diarios. Después de la desmovilización, se convirtió en profesor y aprendió ábaco. Unos años más tarde, no sólo podía hablar y escribir, sino también calcular. Posteriormente, le recomendaron trabajar como contador en la empresa de alimentación del condado hasta su jubilación.
Ya conoces a Helen Keller, ella nació sorda, muda y ciega. Aprender es imposible para la gente corriente, pero ella superó muchas dificultades y más tarde se convirtió en una famosa escritora, educadora y filántropa estadounidense.
Hay demasiadas historias similares arriba, lo que demuestra que el trabajo duro vale la pena y el aprendizaje no es una excepción.
Puedes trabajar duro en los siguientes aspectos:
1. Comprar libros e insistir en el autoestudio. Comience con lo básico. Si no comprende, puede preguntar a otros. Una persona a la que le encanta aprender no se negará. También puedes consultar tu teléfono móvil.
2. Hazte amigo de personas que tienen conocimientos y les encanta aprender. Como dice el refrán, aquellos que están cerca de Zhu se pondrán rojos de una manera sutil, lo cual es muy útil para tu aprendizaje y mejora.
3. Si quieres mejorar tu nivel cultural, puedes apuntarte a una clase de tutoría de educación para adultos. Estudiar después del trabajo puede mejorar rápidamente tus conocimientos y obtener un título, lo que te será de gran ayuda para encontrar trabajo en el futuro.