El baloncesto es el juego de gigantes. En la historia del baloncesto, los deportistas no son sólo de carne y hueso, siempre están envueltos en un velo de misterio. Ellos son los que cambian y desarrollan el baloncesto, son los que verdaderamente componen la música del juego.
Los jugadores de baloncesto son héroes debajo de la canasta. Para todo novato, imitar los movimientos y actitudes de esos grandes deportistas es parte del aprendizaje. Pero en los últimos días, o más bien durante la última década, los medios y el mundo se han vuelto cada vez más conscientes de los viejos atletas rancios. A fines de la década de 1990, los ex gigantes de la NBA acababan de irse y, de repente, fanáticos y periodistas comenzaron a discutir quién los reemplazaría. ¿Quién cubrirá sus vacantes? ¿Quién liderará el equipo como ellos, vencerá a oponentes como ellos y brillará como ellos en la cancha? Todo jugador joven de la NBA está cargado de expectativas que nunca podrá cumplir, incluso si no quiere admitir que quiere eclipsar la brillantez de sus predecesores. Es un espectáculo loco en el que nunca encontrarás las respuestas; nunca serás el ganador final. Los héroes de la NBA que han pasado los mejores años de sus carreras, sin importar cuán brillantes hayan sido, están condenados al fracaso.
Es por ello que LeBron James puede convertirse en el mayor sucesor de la historia de la NBA. Goza del mayor regalo: el espacio. Sólo manteniendo un cierto espacio con el pasado puede darnos un futuro amplio; está tan cerca de la superestrella que la distancia entre la realidad y las expectativas puede darnos la oportunidad de comprenderla de manera integral, correcta y verdadera. Si seguimos buscando lo viejo, nos perderemos lo nuevo que Él nos trae. Porque LeBron está aquí para crear, no para imitar.
Los héroes necesitan espacio para hacer su magia. Bajo el ataque de otros maestros de todos los ámbitos de la vida, los héroes del baloncesto luchan por extender sus alas. A través de constantes preguntas, informes y votaciones, podemos ver si son tan buenos como aquellos grandes predecesores o si los han superado. Queremos ver a los héroes de hoy extender sus alas incluso si están paralizados por su pasado. Queremos que respiren, se eleven, se desempeñen y triunfen. Pero para LeBron James, todo el mundo del baloncesto debería detenerse y tomar nota: porque, como un gato con nueve vidas, está destinado a la inmortalidad.
La historia de LeBron siempre ha sido de progreso y victoria. La leyenda de un héroe siempre sigue su lucha. De manera similar, el ascenso de un héroe siempre se registra en la historia comparándolo con sus predecesores. Entonces, ¿dónde reside el éxito de LeBron? Y aquí hay un vistazo a su carrera: Novato del Año, dos veces All-Star, MVP del All-Star, jugador olímpico y próximo Campeonato Mundial, lo que hace que sea fácil comparar su éxito con el de los grandes atletas que lo hicieron. vino antes que él. Sin embargo, como todo héroe, fue su arduo trabajo lo que hizo de LeBron lo que es hoy. Existe una trama así en cada historia maravillosa. El segundo acto de la historia es cuando el protagonista está a punto de completar la meta que enfrenta todos los días y se encuentra con un desafío. Así como el sol sale todos los días, estos obstáculos vuelven a aparecer todos los días. Una vez que vences a tu oponente, se acaba el viaje corto por carretera, el récord, el sprint, el ejercicio... y todo vuelve a terminar al día siguiente. Esto no es sólo un desafío para la resistencia física y mental, sino también una prueba para la fuerza de voluntad del jugador: cuando su cuerpo quiere parar y descansar, su espíritu quiere continuar: esta es una lucha diaria. LeBron enfrentó constantemente estos obstáculos y creó su mito en el proceso de superarlos. No siempre vemos estos tiempos difíciles, pero somos testigos de sus logros.
¿Es LeBron James el sucesor con el que sueñan los aficionados al baloncesto? ¿Fue enviado a continuar la gran obra iniciada por quienes le precedieron? Sí, nos lo ha demostrado. Si le damos más espacio, lo hará mejor.
¡Regala puntos! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! ! !