Con las fuertes órdenes de los oficiales, las filas de formaciones en el campo de entrenamiento realizaron varios movimientos cuidadosamente. En mi opinión, todo es tan novedoso. Me quedé allí, en un mar de tropas militares, experimentando el vigor y la vitalidad de la juventud.
Siempre he creído que “no hay nada que no puedas hacer cuando eres joven”. Como jóvenes de la nueva era, como pueblo Huanong de la nueva era, debemos heredar el lema de la escuela de "leer con diligencia y mejorar, establecerse y convertirse en un líder". Explora tu potencial y haz realidad tus ideales.
En el entrenamiento militar, lo más inolvidable para mí es estar de pie en la postura militar. En ese momento mis piernas estaban entumecidas, como si ya no me pertenecieran. En ese momento, quise denunciar el informe, pero cuando vi a todos los demás parados allí, serios e inmóviles, dudé. Todos somos jóvenes, ¿por qué ellos pueden hacerlo y yo no? Quiero demostrar que no soy peor que ellos. Aunque mi postura militar no era tan estándar, me aplaudí con mucha confianza porque persistí. El poder de los modelos a seguir es infinito. Pude perseverar hasta el final, gracias en parte a los modelos a seguir de mis instructores y compañeros de armas. Quiero agradecerles sinceramente, especialmente las cuidadosas enseñanzas de los instructores que más me conmovieron. Se tomaron la molestia de corregir cada error que cometí, fueron serios pero no groseros, y atentos pero no indulgentes.
En un día de entrenamiento militar, obtuve mucho. Este conocimiento y experiencia sentarán una base sólida para nuestro futuro. Definitivamente apreciaré esta oportunidad ganada con tanto esfuerzo, entrenaré bien y cultivaré mi físico y mi voluntad. Para ser una persona calificada de Huanong, eres digno del uniforme militar verde oscuro que usas.