Las características de los tiempos en la China moderna y las contradicciones entre el imperialismo y la nación china, el feudalismo y las masas populares han determinado que el pueblo chino moderno siempre haya enfrentado dos grandes tareas históricas.
Entre estas dos principales tareas históricas, la primera que debe completarse es lograr la independencia nacional y la liberación del pueblo, oponerse a la agresión de potencias extranjeras y deshacerse del sistema autocrático feudal. Esta tarea histórica determinó que la revolución china moderna fuera a la vez una revolución nacional antiimperialista y una revolución democrática antifeudal.
Para cambiar la situación de opresión nacional y explotación popular, primero debemos llevar a cabo la revolución nacional y la revolución democrática, acabar con la sociedad semicolonial y semifeudal, resolver los problemas de la superestructura y la producción. y así crear las condiciones para la construcción económica a gran escala. La premisa y la base allanarán el camino para una mayor liberación y desarrollo de las fuerzas productivas, haciendo posible que el país se fortalezca y el pueblo tenga prosperidad común.
La historia muestra que las dos principales tareas históricas de la sociedad china moderna no están aisladas, sino interrelacionadas. La primera tarea elimina los obstáculos y crea los requisitos previos necesarios para la segunda; ésta es el objetivo último y el requisito inevitable de la tarea anterior.