El pasado es pasado, no pienses en el pasado, ¡el pasado es para una vida mejor mañana! Por favor ayúdenme, he estado pensando en el pasado.

¿Por qué la gente no debería pensar demasiado en el pasado? Porque es imposible retroceder en el tiempo y lo sucedido no cambiará, como mucho, se puede salvar ahora.

En realidad es una verdad muy simple. Por ejemplo, si ayer comiste un trozo de grasa, hoy te arrepientes porque tienes miedo de ganar peso. Pero, ¿de qué sirve arrepentirte hoy? Después de todo, la carne que comiste ayer ha sido digerida y la grasa se ha acumulado en tu cuerpo. ¿Podría ser que porque te arrepientes de haber comido ese trozo de carne, sigues pensando en ese trozo de carne? ¿Y no te cansarás de ello?

La mejor manera es hacer más ejercicio hoy para eliminar las consecuencias negativas del aumento de peso provocado por comer carne ayer.

Así que no pienses en el pasado y es lo mismo que esta metáfora.