El establecimiento de licencias administrativas debe seguir los principios de apertura, equidad, justicia y no discriminación.
A la hora de establecer licencias administrativas se deben respetar los principios de apertura, equidad, imparcialidad y no discriminación. Esto significa que todos los reglamentos relacionados con las licencias administrativas deben hacerse públicos, y los reglamentos que no se hayan hecho públicos no se utilizarán como base para la implementación de las licencias administrativas. Al mismo tiempo, el proceso de implementación y los resultados de las licencias administrativas deben ser abiertos y transparentes, a menos que involucren secretos de estado, secretos comerciales o privacidad personal, para garantizar el derecho del público a conocer y supervisar.
Cualquier solicitante que cumpla con las condiciones y estándares legales tiene el mismo derecho a obtener licencias administrativas, y las agencias administrativas no pueden discriminar a nadie. Los ciudadanos, personas jurídicas u otras organizaciones tienen derecho a formular declaraciones y defensas, y a solicitar reconsideración administrativa o iniciar un litigio administrativo de conformidad con la ley frente a decisiones administrativas de otorgamiento de licencias.