Los antiguos decían que leer es como leer miles de volúmenes y escribir es como tener espíritu. Para mejorar tu nivel de composición, no necesariamente tienes que leer miles de libros. Mientras leas más, tus pensamientos serán ricos; mientras escribas más, tu pluma será como un resorte. Escribir es más un sentimiento. Cuando aprendas a abrazar el mundo, el mundo te dará a cambio palabras más flexibles.
Cuando era adolescente, cuando aprendí a escribir, aprendí a afrontar la vida sola, a enfrentarme sola a mí misma, a pensar en la vida y a afrontar el universo y el futuro. Este es el sonido del crecimiento personal y la unión de la vida.
Creo que este primer comienzo conducirá a avances una y otra vez, mejorando cada vez más y escribiendo cada vez mejor. Registraré mi vida, mis aprendizajes y mis pensamientos en palabras, esperando que sea mejor.