Desde principios del siglo XX hasta la década de 1940 se produjo un calentamiento global, especialmente en el Ártico. Por ejemplo, la temperatura de la superficie del agua del mar de Barents fue 8°C más alta en 1919-1928 que en 1912-1965438, por lo que el mar de Barents era 8°C más cálido en la década de 1930. Este calentamiento alcanzó su punto máximo en la década de 1940. Desde entonces, el clima mundial se ha vuelto más frío y la temperatura al norte de los 60°N es cada vez más fría. Desde los años 60, el clima en las latitudes altas se ha vuelto cada vez más frío. Por ejemplo, en el invierno de 1968, Islandia y Groenlandia estaban conectadas por hielo. La tendencia del cambio de temperatura en China es básicamente consistente con la tendencia de evolución de la temperatura promedio global, con el punto de inflexión en la década de 1940. Desde finales de la década de 1940 hasta el presente, la tendencia general de la temperatura en China es descendente.
Cambios globales en la temperatura
¿Cambiará significativamente el clima mundial en los próximos 10 años en comparación con los últimos 20 años? La respuesta es diferente. Algunos climatólogos extranjeros suponen que la tendencia al enfriamiento que comenzó en los años 40 continuará. Creen que la frecuente aparición actual de condiciones climáticas anormales es un signo de deterioro del clima, lo que significa que la edad de hielo o la Pequeña Edad del Hielo está a punto de llegar. Sin embargo, otros climatólogos creen que el mundo está entrando en un período de rápido calentamiento debido al rápido desarrollo industrial y a los crecientes niveles de dióxido de carbono en la atmósfera, y especulan que habrá un aumento de las temperaturas globales, sequías en latitudes medias, derretimiento del hielo polar y nieve, aumento del nivel del mar y fenómenos como inundaciones de llanuras costeras. Basándose en el análisis de los patrones históricos del cambio climático, los climatólogos chinos creen que, aunque el cambio climático actual es más prominente, sigue siendo una fluctuación general y no conducirá a un enfriamiento sostenido ni a una sequía. En la actualidad, algunos climas anormales no han excedido la severidad de la historia, por lo que este tipo de anomalías climáticas no pueden considerarse como el comienzo de una tendencia al cambio climático. Algunos climatólogos de Estados Unidos creen que es probable que las condiciones climáticas futuras sean similares a las condiciones promedio de los últimos 30 años. Sin embargo, la mayoría de la gente prefiere un pequeño aumento de las temperaturas globales en el futuro, especialmente en latitudes altas.