Apreciación de la prosa del barquero

Apreciación de la prosa del barquero

Otro día, han pasado muchos años, aquí todo es normal, no hay viento ni olas. En el sombrío viento otoñal, algunas flores blancas cayeron al agua como en la otra orilla. Incluso las flores estaban cansadas de los días aburridos en el ferry. Sentado en la proa del barco y mirando hacia la otra orilla, había humo y silencio. .....

Las hojas muertas gimen con el viento. ¿Te lamentas de la ignorancia del barquero al otro lado del río, o te lamentas de que mi pobre barquero haya sido engañado por el destino? Nada que decir. Cuantos suspiros hay en el viento. Soy barquero y sólo vivo con gente reflexiva.

Las olas del agua brillaron y enrollaron una hoja triste. Soy barquero y nunca he puesto un pie al otro lado. ¿De qué sirve cruzar el río si no puedes ver las flores al otro lado?

Este es un par de ojos muy limpios. ¿Por qué no me dejas verlo un rato? ¿Por qué tenemos tanta prisa por cruzar el río? Sosteniendo el bote, miró a la mujer sentada en la popa. Este era el primer invitado del día. Dijo que no tenía corazón, pero tenía un par de ojos limpios. Ella no dijo mucho, solo expresó sus condolencias y dejó de hablar. Al mirarla a los ojos limpios, me quedé sin palabras.

Ella desembarca, va derecho y nunca mira atrás.

Yo; agarrado al barco, caminé de frente sin mirar atrás.

El humo se disipó, dejando solo la mitad de un corazón frío. El barco sigue siendo un barco y la gente sigue siendo gente, nada ha cambiado. Si quieres cruzar el río, te ayudaré a cruzarlo. Quiero cruzar el río. ¿Quién peleará contra mí?

Transbordador. Gong, de pelo gris, se estaba muriendo, pero sonrió con indiferencia.

El encaje del otro lado, la apariencia heroica desaparece, y cuando envejeces, solo tienes un par de ojos limpios.

¿Alguna vez has querido cruzar el río? Está bien, te lo haré en la próxima vida. .......