Observar con atención
Cuando los niños tienen una disputa, lo primero que debemos hacer es observar con atención para entender la causa, la intensidad y si los adultos necesitamos intervenir.
Guía de sabiduría
Si el conflicto no es grave, intente guiar a los niños para que lo resuelvan ellos mismos. Anímelos a sentarse y hablar juntos para descubrir la raíz del problema y encontrar una solución. Esto puede desarrollar sus habilidades de cooperación y resolución de problemas.
Mediación justa
Cuando los conflictos aumentan y los niños no pueden resolverlos por sí mismos, debemos brindarles la ayuda y orientación adecuadas sobre una base justa y objetiva para ayudarlos a resolver el conflicto.
Momentos de Enseñanza
Ya sea que haya estado involucrado directamente o no, una vez que se resuelve un conflicto, es una excelente oportunidad educativa. Podemos inspirar a los niños a reflexionar sobre sus comportamientos y actitudes, mejorar su capacidad para resolver problemas y cultivar su espíritu de comprensión, respeto y cooperación.