Muy sencillo. Sácate el pelo y vístete como un lobo. Es sólo un lobo hablando de un tigre. Nunca olvides que eres un lobo,
Sólo un lobo puede ayudarte. Los tigres son demasiado retraídos y venenosos. Si te defines como un tigre, tarde o temprano saldrás herido. Tiene que darse una palmada en el trasero y decidir no tomar ese trozo de carne, pero solo puedes sobrevivir si no lo comes. ¿Te llevará el tigre? Eso es una broma. Si estás con él, es un testimonio del fracaso. Dios lo destinó a irse tarde o temprano. ¿No puedes ver? Si ayudas al lobo a ahuyentar al tigre, el lobo no te dejará vivir. También necesitan la majestuosidad y la fuerza del tigre.
Suaviza tus bordes y observa cómo se enganchan con una sonrisa. Es un drama clásico, es una pena que me lo haya perdido.
Oculta tu temperamento hasta que estalle la guerra. Es hora de ver si el objetivo es un lobo o un tigre y matarlo. En ese momento, no le prestaban atención a una "oveja". Eres los colmillos, los ojos son las puntas y la memoria es el tanque de sangre.
No importa si son extranjeros, chinos o africanos, todos tienen motivos, intereses y codicia egoístas. Lo más esencial es que siguen siendo seres humanos.
No hay diferencia entre las personas.