Muchos sueños conforman nuestra vida. Nuestra vida no es un poema romántico ni una hermosa melodía. Es la lucha entre el sol, el viento y la lluvia, la alternancia de alegría y dolor, y el desierto turbulento que espera que lo crucemos. Nadie está libre de preocupaciones, sin importar los buenos o malos momentos, ya sea un erudito o un escritor, ya sea un trabajador común o un estudiante, no puede escapar de la búsqueda de preocupaciones. Cuando los estudiantes enfrentamos numerosas preguntas de exámenes y la presión de ingresar a la educación superior, todos deberíamos enfrentar estas confusiones con valentía. No hay felicidad sin preocupaciones. Los problemas no son la causa del fracaso, sino la motivación para el éxito. Así como el llanto es la base de una sonrisa feliz. Sin cambios de voltaje, la computadora no puede funcionar. Los empresarios no pueden ganar dinero si no se atreven a afrontar los cambios del mercado.
Tal vez quieras deshacerte hoy de todas las preocupaciones del mañana, lo cual parece razonable. Sin embargo, los problemas de hoy se resuelven hoy y los problemas de mañana se enfrentan y se resuelven mañana. Sólo así la vida será feliz. Enfrentaremos algunos problemas todos los días. Debemos vivir cada día con sinceridad. La tarea de mañana se hará mañana. ¡Primero hagamos la tarea de hoy! La vida es así, paso a paso, y cada paso es un proceso para llegar al final de la victoria.
El problema es un amigo extraño que todo el mundo debería conocer, y deberíamos solucionar algunas de las preocupaciones que nos acosan cada día. Creceremos lentamente entre felicidad y problemas, como las flores que disfrutan del sol y soportan el viento y la lluvia en los campos. Mientras no tengamos miedo de convertirnos en oponentes problemáticos, seguramente haremos realidad nuestros sueños futuros.