Generalmente, las clases online son relativamente gratuitas y puedes tomarlas en cualquier momento y en cualquier lugar. Además, puedes familiarizarte con el contenido muchas veces y utilizar mucho tiempo fragmentado, lo que es imposible de lograr en la enseñanza presencial.
Sin embargo, mientras seas libre, necesitarás tener un fuerte autocontrol para contenerte. El editor ha visto a muchos estudiantes comprar una lección de tres minutos o jugar con dispositivos electrónicos durante un rato. Esto es inaceptable.
Clases presenciales
Las clases presenciales generalmente se realizan en un horario y lugar fijo. La ventaja es que puedes comunicarte con el profesor cara a cara y tener tiempo para disciplinarte.
Pero por el contrario, a las clases presenciales sólo se puede asistir una vez, lo que hará perder mucho tiempo en el camino. Si hay demasiada gente, la eficiencia de la clase se reducirá y los resultados finales también pueden verse comprometidos.
Finalmente, ambos tipos de clases de tutoría tienen sus pros y sus contras. Esperamos que los candidatos puedan tomar decisiones razonables según sus propias circunstancias, ¡y que la que más les convenga sea la mejor!