Aún recuerdo claramente el momento en que vi mi nombre en la lista de admisión. Ese día me quedé frente a la computadora, esperé toda la mañana y actualicé la página web una y otra vez. No sabía qué almorzar, así que terminé de leer por la tarde. Aunque siempre hay una voz en mi corazón que estoy seguro de ganar, pero sin ver la lista final, siempre es poco confiable. No recuerdo cuando. De repente vi noticias en el grupo. Rápidamente miré las noticias y descubrí que la lista había sido anunciada. Inicié sesión en el sitio web de la universidad, respiré hondo, miré la pantalla de la computadora, busqué un nombre y finalmente encontré el mío.
Con un largo suspiro de alivio, salí en silencio y no había nadie alrededor. Llamé a mis padres y les dije con entusiasmo que me aceptaron. Entonces, una persona recupera la compostura, comienza a pensar en las dificultades del camino y comienza a mirar hacia su vida futura. Finalmente aprobé el examen y luego llegó la tan esperada vida de posgrado. ¿lo que sucede?
Tengo muchas ganas de celebrar una fiesta, pero creo que no es fácil aprobar el examen después de tres años de arduo trabajo. Pero mirando a mi alrededor me di cuenta de que estaba solo, de principio a fin. La diferencia entre aprobar el examen y no aprobarlo es que mi estado de ánimo es diferente. ¡Para los de afuera, sigo siendo yo! La única diferencia es que después de publicarlo en Moments, recibí innumerables me gusta y varios mensajes de amigos.
El segundo día después de realizar el examen, dormí mucho tiempo. Nunca me había sentido tan a gusto en los últimos tres años. Ya no tenía preocupaciones en mi corazón y mi deseo se hizo realidad. Toda la persona está más emocionada de empezar de nuevo. Fantaseaba sobre qué clases tomaría durante la escuela de posgrado, a quién conocería y qué conferencias escucharía...
Cuando supe que había sido admitido, me comuniqué activamente con el instructor y luego esperé. por la respuesta del profesor, preocupado ¿Cuándo podré entrar al laboratorio? Con ganas de un nuevo comienzo. Sin embargo, la vida de la escuela de posgrado es un nuevo capítulo y un desafío. Todo comienza de nuevo, ¡pero esta vez eres un estudiante de maestría!