Introducción al espino
El espino no requiere mucho suelo, pero crece bien en suelos franco arenosos ligeramente ácidos con suelos profundos, textura fértil, textura suelta y buen drenaje.
Al espino le gusta la luz y tolera la sombra. Generalmente se distribuye en montañas áridas, laderas soleadas, laderas semisoleadas y valles, con una pendiente de 15 a 25 grados. Es tolerante a la sequía. Cuando hay demasiada agua, las ramas y hojas tienden a crecer en vano.
El espino crece en los bordes de los bosques o en los arbustos de las laderas a una altitud de 100 ~ 1500 m. El espino es muy adaptable y le gusta un ambiente fresco y húmedo. Es resistente tanto al frío como a las altas temperaturas y puede crecer a -36 ~ 43°C.