Otro medio importante para mejorar la eficiencia del aprendizaje es aprender a concentrarse. El proceso de aprendizaje debe ser un proceso de pensar con el cerebro. Ya sea que uses los ojos para leer, la boca para leer o las manos para copiar, todas son formas de ayudar al cerebro. La verdadera clave es pensar con el cerebro. Por ejemplo, al memorizar palabras, si simplemente las busca o las copia sin rumbo fijo, es posible que tenga que memorizarlas muchas veces, lo que no es fácil de recordar. Pero si puedes dar rienda suelta a tu imaginación y utilizar el método de asociación para recordar, a menudo podrás recordarlo rápidamente y no olvidarlo fácilmente. Los métodos para memorizar rápidamente palabras en inglés introducidos en muchos libros ahora también enfatizan el papel de la asociación cerebral. Se puede ver que si puede concentrarse y aprovechar al máximo el potencial del cerebro, el efecto de aprendizaje definitivamente mejorará enormemente.
Otro factor importante que afecta la eficiencia del aprendizaje es el estado de ánimo de las personas. Es posible que todos hayan tenido esta experiencia. Si algún día estás lleno de energía y energía, te sentirás relajado y aprenderás rápidamente. De hecho, aquí es cuando nuestra eficiencia de aprendizaje es alta. Por eso, es muy importante mantener una buena autoemoción. En la vida diaria, los estudiantes deben tener una actitud más alegre, no pensar demasiado en cosas desagradables y tratar a las personas y las cosas que los rodean con una actitud cálida y optimista hacia la vida, porque esto es muy útil para los demás y para ellos mismos. De esta manera, podrás crear una atmósfera muy relajada a tu alrededor y te sentirás especialmente enérgico cuando estudies.