La actuación y características esenciales son las siguientes: 1. Utilizar el castigo como medio de educación y formación social. Básicamente, el castigo no es castigar a los delincuentes, sino permitirles volver a comprender los valores de la sociedad, reintegrándose así a la sociedad y adquiriendo su propio valor.
En segundo lugar, la gente cree que el castigo debería apuntar principalmente a la infracción y no al propio infractor. Las sanciones deberían utilizarse para frenar la delincuencia, no para castigar a los delincuentes, sino para alentarlos a cambiar su comportamiento y reintegrarse a la sociedad sobre la base de sus propios valores. En tercer lugar, se enfatiza que el castigo de los delitos debe basarse en los intereses sociales y la eliminación de la inseguridad social como punto de partida, en lugar de instigar a los delincuentes a ser castigados como núcleo.
En cuarto lugar, enfatizar la responsabilidad social de los delincuentes en lugar de centrarse en el castigo. A los delincuentes se les debe permitir volver a comprender los valores de la sociedad y reintegrarse a ella para obtener su propio valor.
5. Si se cree que un delincuente tiene la capacidad de cambiar su comportamiento, debe respetar la dignidad personal del delincuente, respetar la libertad personal del delincuente, respetar los derechos personales del delincuente y proporcionarle medidas que son propicios para cambiar su comportamiento. En sexto lugar, se cree que el castigo por los delitos debería centrarse en la educación y la corrección y en el mantenimiento de la estabilidad social, en lugar de la venganza y el castigo.
La esencia de la perspectiva del derecho penal positivo;
La perspectiva del derecho penal positivo en la práctica legislativa del derecho penal contemporáneo tiene fundamento social, fundamento político y reconocimiento de la opinión pública. Desde un punto de vista técnico, el concepto positivo de derecho penal se materializa añadiendo nuevos delitos o modificando los elementos constitutivos de delitos antiguos, y se presenta como un delito sin daño real. La "Enmienda al Derecho Penal (11)" es una norma típica que implementa el concepto de derecho penal positivo. Responde a las necesidades sociales desde los aspectos de delitos de conducta, delitos peligrosos, delitos de situación, etc., y se centra en la protección del público. seguridad, orden económico de mercado, orden de gestión social e intereses militares nacionales y otros intereses legales colectivos.
Comparada con la visión negativa del derecho penal, la esencia de la visión positiva del derecho penal es una visión preventiva orientada al futuro. El derecho penal dominado por el concepto de derecho penal positivo rompe con el paradigma del derecho penal tradicional, pero utilizar la teoría del derecho penal tradicional para criticar el concepto de derecho penal positivo no significa necesariamente que viole el principio del Estado de derecho. Más bien, refleja la involución del derecho penal tradicional. Debemos mirar racionalmente el concepto de derecho penal positivo, que se fundamenta en la justicia preventiva y se disuelve cambiando las funciones del derecho penal, ampliando los intereses jurídicos colectivos e incorporando nuevos derechos e intereses a la jurisdicción.
Sin embargo, basándose en las características de doble filo del derecho penal, la visión positiva del derecho penal debería limitar el alcance de la criminalización y la causalidad de alta probabilidad como límite mínimo práctico.