Los ojos tienen una larga historia. En los libros de historia chinos y extranjeros se registra que las gafas se originaron en China. El desarrollo y los cambios de las gafas han transcurrido durante miles de años, y los ojos se han extendido desde China al extranjero. Las primeras gafas en los países occidentales aparecieron a finales de 2013. En aquella época, el italiano viajó por toda China para la corte de la dinastía Yuan. En el proceso, vio a alguien que llevaba gafas y se interesó mucho. Después de regresar a China, extendió su mirada hacia Occidente, por lo que el primer lugar donde se fabricaron gafas en Occidente fue su ciudad natal.
Los ojos más primitivos se originaron a partir de las lentes, es decir, las lupas. Su fabricación y aplicación están muy relacionadas con la aparición de las lentes ópticas. Después de que se inventaron las gafas en China, gradualmente se extendieron al extranjero. En 1784, un inventor estadounidense padecía miopía e hipermetropía, por lo que inventó las gafas tanto para la visión de lejos como para la de cerca. En 1825, el astrónomo británico George Avery inventó las gafas para corregir el astigmatismo. Dos años más tarde, Fuller inventó la lente cilíndrica, que también se utiliza para corregir nuestra vista. Los científicos perfeccionaron las lentes bifocales con forma y luego fusionaron las lentes bifocales, denominándolas "lentes bifocales invisibles". Desde la invención de las gafas, muchos científicos las han mejorado y perfeccionado.
La invención de las gafas abrió un mundo nuevo para muchas personas. Reabrió las ventanas que habían estado cerradas o entreabiertas por diversos motivos para ver la cara colorida del mundo. Nos da a las personas miopes la oportunidad de ver el mundo nuevamente. Aunque los ojos son un pequeño invento, tienen una gran importancia.