Llegué al lago Dongting, donde el agua brillaba como un jingzi. Parecía como si los insectos susurraran y luego avanzaran. Caminando por un sendero estrecho, el viento arrastraba la hierba silvestre y las flores se marchitaban, y el poder de la vida inclinó la cabeza y convirtió el peligro en paz. De repente llegaron las hadas doradas. Esas pequeñas hadas amarillas se elevan con el viento y caminan con gracia por el cielo. Mientras atravesaba esta soledad original, no pude evitar sentirme cómodo. Miré a mi alrededor y no había hojas caídas por ningún lado. Yacían planos e irregulares sobre la fría tierra. No sentí en absoluto el olor envejecido de las hojas caídas, pero la elasticidad, la vitalidad y el entusiasmo de las frases fueron refrescantes. Simplemente sentí una especie de poder que venía del fondo de mi corazón.
Las hojas caídas tocaron el arce sin darse cuenta, como despidiéndose de él, ¡eh! También hay un sentimiento que quiero decir pero no puedo expresar. Volví a mirar las hojas caídas: ¿por qué no sienten frío en la tierra? Quizás... ¡sí! Tienen tanto entusiasmo porque hay otro lote de nuevas vidas esperándolos. Se puede decir que están listos para partir. ¡Estas hojas caídas no se sentirán viejas, solo sentirán que son una vida joven, explorando sin cesar en este vasto mundo!
¡Hojas que caen! Me das una inspiración infinita. En este mundo, el fracaso está bien, pero mientras tengas mayor entusiasmo y esperanza de éxito, en un futuro cercano, la belleza te pertenecerá, las hojas caídas. En ese difícil camino de la vida, no olvides guardar los paisajes más bellos en tu corazón y nunca borrarlos.
Nombre: Wan Junyi Escuela: Escuela secundaria Chuanwei, calle Yanjia, distrito de Changshou, ciudad de Chongqing Clase: Grado 2 (Tercer grado el próximo semestre) Clase 2 Instructor: Wang Xinghua Correo electrónico: